domingo, enero 28, 2007

Atentamente

Los atardeceres son siempre mejores
que los poemas sobre atardeceres
—dijiste—. En aquel tiempo
avanzábamos con la certeza de quien sabe
que la muerte es una cita inevitable
y que hay precios que no conviene pagar
por postergarla.
Si este lugar no hubiese existido;
si pieza a pieza no hubiésemos compuesto
este rompecabezas
donde soñamos y abjuramos de espaldas a la noche;
si no hubiese existido este lugar
nuestros cuerpos nunca habrían estado unidos,
nunca nos habríamos hecho fuertes
sobre la costumbre,
empeñados en desconocernos,
anochecidos
por todas las guerras del planeta
y la furia de una soledad lejana y hermosa
como una isla.
Este lugar siempre será nuestro,
por eso sabes que te negaré siempre,
por eso nunca me hallarás sin ti.
Más tarde, mientras la tierra aguarda,
dejarás que el viento responda.
Pero ahora quiero tenerte aquí,
atenta a lo más nimio,
luego de que los trenes partan
—y yo tras ella—
hacia el próximo poema
y el día gire en una palabra.

Tuyo. Atentamente.
Enrique.


(De Conversaciones con la poesía)
enero 28 y 29, 2007

2 comentarios:

mabel casas dijo...

enrique
original este "atentamente"
hay en este poema un sabor dulzón y
acre a la vez

es como un rito "persiste en mí !:palabra verso
juntos hemos combatido antes,habremos poema cada vez que podamos ser compañeros de nuevo...

cariños desde la palabra que también nos hace ir tras ella aquí en argentina
riosdelasurera.blogspot.com
cuenteraderio.blogspot.com
mabel

enrique sanmol dijo...

No sé cómo se me pasó este comentario sin respuesta, Mabel. Muchas gracias por la visita. Te dejo también mi cariño desde esta orilla del Mediterráneo.