jueves, noviembre 21, 2019

Té para dos


Memphis Moon - Jason Molina

En aquella pared, casi sin luz,
rayamos unas iniciales
y, a modo de marco,
trazamos un pequeño círculo.

Nos conocimos a deshora
en la antesala del dolor,
dos cegatos contemplando la luna.
El otoño nos brindaba dos tazas de té.

Después, lejos de aquellas letras,
nos atrevimos a maravillarnos.
Y me hablabas de cualquier cosa
que no importaba y era todo.

En ocasiones la realidad
se muestra con piel de camaleón
y aunque en horas inciertas
el tañer de las campanas pudiera engañarnos,
terminamos asumiéndolo:
los años no discurren hacia atrás.

En voz muy baja nos despediremos,
ojos extraviados y pájaros oscuros a la fuga
—triste manera de pronunciar rotos
regresaremos a un cuarto vacío
y permaneceremos allí, entre
poemas grises, donde el agua,
sin esperarnos, correrá sin freno.

Té para dos.
Vencidos,
casi siempre equivocados
y, a pesar de todo,
sobrevivimos.



noviembre 16, 2019