sábado, septiembre 16, 2006

Habrá que sabernos de nuevo



Habrá que sabernos de nuevo,
desocultos de toda sombra,
de toda manera de estar.
Sabernos
mutuamente nosotros,
donde siempre estuvimos.
Porque aquí crecen las reliquias
en una noria que empuja nubes misteriosas
e irrepetibles, nubes que crecen y te dicen
y te preguntan, por ejemplo,
si sabrías, por una última vez,
conservar algo de aquella espuma,
si ahora que eres malva
como la ley de tus paisajes
sabrías retener el mar
en su más y más silencio,
en su sólo lluvia o todo,
donde no elijo.
Habrá que saber, y no sé. No sé.

septiembre 16, 2006

2 comentarios:

e g f c dijo...

me cuentas algo sobre éste...

enrique sanmol dijo...

El poema dice que no lo sé. Tal vez eso de saber sólo sea posible si pudiéramos recobrar la mirada del niño...